miércoles, 2 de diciembre de 2009

Sepultados bajo el SUNAMI de la DROGA

¿podremos salir a flote?

Hace ya unos años en que un vecino profesor de una escuelita del sector, nos lo advirtió:
“ya llega la droga. ¿Podremos resistirle? Ya viene nuestro SUNAMI”.

EL SUNAMI YA LLEGÓ … …
Y NOS ENCONTRAMOS SUMERGIDOS EN EL SIN SABER NADAR.

Aunque no logramos ni siquiera la posibilidad de tener datos estadísticos objetivos, ¡tan poderoso lo es!, sin embargo no tenemos ninguna duda de que estamos sumergidos :
muchos jóvenes-niños y mamás dueñas de casa solas, como mini-traficantes;
otros como consumidores habituales (no podrían serlo de otro modo);
y todos, como cómplices implicados por nuestro silencio, víctimas del temor.

Al reincorporarme en nuestra parroquia tuve un saludo de lo expresa mejor:

Recién cayendo la tarde, me detuve en mi bicicleta ante un semáforo en rojo en pleno centro de la población.
Junto a mí escuché desde el paradero del 05, una voz de un niño de unos 12 años: ‘viejo c... de tu m… , ¿querís que te meta un escopetazo?’ A mi pregunta ¿qué te pasa?, ¿sabes quien soy?, agregó: ¿erís un paco?. Y al decirle que era el cura de la parroquia de la esquina, agregó ¿qué es eso?.
La luz verde me invitó a seguir pedaleando, mientras le decía: ‘otro día te lo explico’. La verdad es que en ese momento sospeché que la escopeta que tenía entre sus manos no era de juguete…

Entre $300.000 y 500.000 te ofrecen por guardar en tu casa un fin de semana un paquete de droga.
¿Qué mamá puede no sucumbir a esta oferta que le permitirá proveer a la alimentación, ropa y educación de sus hijos, desde su pobreza y el abandono de su familia por el papá cesante, … más aún si así queda ‘asegurada’ de por vida en tener las medicinas y todo lo que necesite … y hasta un funeral de primera cuando lo requiera?

Y ¿qué joven egresando de 8º básico preferirá seguir estudiando para ser egresado de Media cesante, ante la oferta alternativa de ser un mini-traficante con dinero y auto los fines de semana?

¿Quién dejará de concurrir al llamado del fuego artificial a medio día y a plena luz, para adquirir la 'droga llegando a casa', más aún si él mismo debe vender para poder consumir la que necesita imperiosamente en su esclavitud de drogodependiente?

¿Quién?
Sólo los carabineros, que tendrían que enfrentarse con las cuchillas, revólveres o escopetas recortadas que les esperan y en seguida con el sumario correspondiente, arriesgando su vida, profesión y familia, mientras ‘la justicia’ deja en reiterada libertad a los segundos por ser ‘menores de edad’ y no busca detrás de estos a los peces gordos que en autos último modelos con alerones que desafían al viento, se pasean a toda hora por nuestras calles y pasajes, dueños de nuestro presente y futuro, como ‘benefactores’ de los pobres y desesperanzados.


El Viernes Santo, en dos escuelas particulares católicas del sector parroquial, afirmé: “SEGURAMENTE más de uno de ustedes ha recibido la oferta de una cuantas monedas como Judas, para matar a Jesús, ahora en sus amigos con la droga…”
Al mirar a los de 8º básico, todas las miradas estaban inclinadas al suelo.

Hay que fortalecer una familia destruida en la práctica y también por las leyes…
hay que mejorar la educación con educadores que perdieron el respeto de sus alumnos cuando no les importó dejarlos abandonados buscando ante todo ‘sus derechos’ …
¿Será posible?

Hay que acoger cordialmente a los que ya no tienen al papá ausente, a la mamá encarcelada por comercio de drogas…, ni familia;
hay que capacitar laboralmente, llevarles a una práctica laboral en empresas amigas,
y luego apoyarles a formar mini-empresas… … …
¿para ganar con esfuerzo en un mes lo que en un fin de semana sin esfuerzo les ofrecen lo ‘señores de la droga’ con mejores ‘previsiones’ que cualquier afp.?

En una reciente reunión en nuestra sede parroquial, se nos decía:
“ustedes tienen la motivación que ha llegado a todos
y la fuerza espiritual imprescindible
para resucitar de bajo de este SUNAMI:
su nombre, EL TATA ESTEBAN,
aceptado en sus valores y reconocido por católicos, evangélicos y ateos de la población.”

Cultiven la semilla sembrada por su palabra y testimonio de vida, y que sigue con fuerza presente en medio de ustedes.

Sigamos la huella de ESTEBAN, “FIJOS LOS OJOS EN JESÚS”, siendo
“MISIONEROS CON CRISTO EN LA VIDA DE NUESTRO PUEBLO”.


El SUNAMI no nos ha vencido aún hasta la muerte.

Hay una tumba vacía… y un SEÑOR RESUCITADO.


Padre Miguel Esteban Macaya Montero, sscc
Parroquia San Pedro y San Pablo,
La Granja, Stgo., 02 dic. 2009.

1 comentario:

Gabriel Bunster dijo...

Esto es hablar claro y con verdad; gracias Miguel.